viernes, 30 de octubre de 2015

¿Villa? ¿hermosa? Estado de Tabasco

   Tabasco suena a salsa picante, ¿verdad? Pues el estado de Tabasco no se caracteriza por ser más picante que los demás precisamente, ni por tener más chiles o mejores salsas, pero sí por ser el mayor productor de cacao de México.



   Y Villahermosa suena a villa y hermosa, ¿verdad? Pues nada que ver. Tal es así que no tengo ni una foto de la ciudad.

   Llegamos por la tarde y al bajar del autobús ¡raca! golpe de calor: 36 grados, 90% de humedad... Esto me resulta demasiado familiar. 

   Llegamos al hotel reservado en un taxi que se pierde, a quien le tengo que explicar cabreada que los números más bajos de la calle están más cerca del centro; el hotel, destartalado en general, no tiene tapa del váter. No la innecesaria, sino sobre la que te sientas. Pido otra habitación, pero todas están igual, así que nos vamos por donde hemos venido de cabeza en busca de otro hotel.

   En la farmacia nos advierten que tengamos cuidado con la chinkunguña, una enfermedad que transmite un mosquito cabrón en esta zona del mundo, parecida al dengue, y con la higiene personal, porque aquí hay sarna. ¿Sarna?, ¿lo de los perros? A María ya le pica todo el cuerpo, y a mí el alma.

   Las cuatro calles céntricas y peatonales están llenas de chasca china: solo hay tiendas de ropa y de ganchitos del pelo. ¡Una librería!, vaya, vacía y con mosquitos revoloteando. Tristemente, acabamos cenando en una cadena de comida rápida. 

   Por fin nos vamos bajo el aire acondicionado de nuestro nuevo hotel para poder respirar. Y pienso: por Dios, vayamos ya a los pinches cacaotales y que esto acabe pronto.


No hay comentarios:

Publicar un comentario